Versiones del microcuento

Original

 Si estuvieras rodeado de estruendosos volcanes, si no hubieras erupcionado súbitamente en el vasto verde. Si hubiese una realidad que se hundiera en la belleza, si tan solo no tuviera la mortaja el cadáver, monje, con tu libro sagrado seguirías adelante. 

Si no tuvieras las piernas cortadas, que debajo del manto de roca fueron buscadas, si no hubieses confiado en ese colono aberrante, esas piernas firmes seguirían adelante.

Fantasía

Corre alrededor de los estruendosos volcanes, no dejes de bailar con tu pasividad en el vasto verde, encuentra la realidad que se hunda en su belleza, ríe, llora y canta para que te deje entrar. Sigue al monje con su libro, él te guiará, recuerda que al desdichado monje le mocharon sus piernas. Bajo el manto rocoso buscarán, pero el resplandeciente chamuco será quien los encuentre. Un consejo te susurrará (no confíes en el colono aberrante), recuérdalo y sigue la luz hasta el final. 

Drama

Ardiente sopla el viento, quemando todo sin parar. La vista vuelta nada, en esta ceguera deberás seguir adelante, monje. Escucha los truenos, que estás rodeado de estruendosos volcanes, siente el vasto verde y húndete en su belleza porque sino sin piernas desconsolado gritarás del dolor silencioso. Sigue adelante y no voltees atrás, iracundo los dioses buscan al colono por aberrante. Encuentra, monje, al colono vuelto cenizas, lee el libro y que pague por sus pecados.

Romance

Entrega tu libro monje, los dioses iracundos están. Busca a tu amada antes de que el peligro la pille. Mira mas allá y sigue el vasto verde, húndete en su belleza. No olvides que su amor es prohibido y maldito, condenados al sufrimiento, al hueco sentimiento de la negación. Huye con tu amada, baja el manto del volcán antes que te encuentre en el éxtasis de la pasión. 

Ciencia ficción

Se escucha a lo lejos estruendosos volcanes, no paran los truenos de retumbar. Entre el negro y el blanco el verde empatiza más. Todos se preguntan donde el monje está, se dice que el con un libro en el profundo del cráter con el verde se encuentra. Pero que ilación tiene el rumor, solo una mente con demencia creería el rumor. Cada vez se cuchicheaba mas sobre el monje y su amigo verde, que extraño era todo, hasta que un día el monje y el amigo verde desvanecieron en lo profundo de  una brillante luz.